lunes, 28 de noviembre de 2011

Elpedido.es: una alternativa interesante

Todos estamos de acuerdo con decir que cocinar es un arte.Y lo es realmente.

Cocinando podemos dar libre curso a nuestra imaginación y creatividad y hacerlo para un ser querido nos brinda una sensación hermosa. Pero vamos...No todos los días son ideales para encerrarnos en la cocina y convertirnos en chefs.

Entonces ¿qué podemos hacer cuando no tenemos las ganas de cocinar, ni los ingredientes en casa o tenemos un antojo de alguna comida particular que no sabemos preparar?

viernes, 18 de noviembre de 2011

Un plato típico de todas partes

Hace pocos días invité a comer a unos amigos extranjeros que estaban de visita en el país. Pensé que lo más conveniente era preparar comida típica colombiana. Luego de pensarlo un buen rato me decidí por un Ajiaco Santafereño y como postre un Pionono relleno de arequipe.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Los secretos de la sazón

Cada vez que tengo invitados a comer o cuando en las reuniones con amigos el tema es culinario, suele haber alguien que comenta que pese a que ocasionalmente se atreve a cocinar, no le gusta hacerlo porque ha descubierto que no tiene sazón (entendida como el gusto y sabor que se percibe en los alimentos). Parece que muchas personas piensan que la capacidad de preparar alimentos con buen gusto y sabor es un atributo innato que poseen unos pocos privilegiados y del que carecen la mayoría. Como evidencia de ello, aducen que han intentado preparar en varias ocasiones algún plato siguiendo al pie de la letra las instrucciones (cantidades y procedimientos) de una receta obtenida de buena fuente (un buen libro, un cheff famoso que la enseñó a través de la televisión o un sitio Web de cocina confiable), pero que el resultado ha sido lamentable

martes, 4 de enero de 2011

Remordimiento por comer: causas y consecuencias

Es muy frecuente que a causa de la temporada navideña, hayamos incurrido en excesos, tanto en la comida como en la bebida, los cuales se hacen notar de diversas maneras. Esto nos produce un remordimiento y cierto sentimiento de culpa que quizás se menguan en la medida en que traemos a nuestra memoria los agradables momentos que pasamos y los deliciosos platos que disfrutamos. Pero el espejo y alguna que otra dolencia o efecto de aquello, se ocuparán de recordarnos una que otra vez (al menos por un tiempo) que, a pesar de todo lo bueno, algo estuvo mal.